Visión general
Producción de fenol en el proceso químico orgánico
Instrumentación de precisión para supervisar y controlar la composición del almacenamiento de cumeno para la producción de fenol
El fenol es un importante producto químico industrial y sirve como producto intermedio, por ejemplo, en la fabricación de plásticos como las resinas fenólicas y epoxídicas, así como de adhesivos, disolventes, conservantes de la madera e insecticidas. El método industrial preferido hoy en día para producir fenol es la síntesis de fenol en el proceso Hock de tres etapas a partir de isopropilbenceno (cumeno), que se forma primero a partir de benceno y propeno. El cumeno se oxida primero por medio del oxígeno atmosférico para formar un hidroperóxido, que en una segunda etapa, bajo la influencia de ácidos fuertes, se descompone en fenol y acetona. Estas dos sustancias pueden separarse al final en dos cadenas de destilación consecutivas. El desarrollo simultáneo de dos productos valiosos y fácilmente separables hace que este proceso respetuoso con el medio ambiente sea especialmente rentable.
En la actualidad, el proceso se centra en aumentar el rendimiento de los dos coproductos, así como en evitar subproductos no aprovechables ni volúmenes de aguas residuales excesivos. Las técnicas modernas pueden aumentar el grado de oxidación del cumen en torno a 50% y reducir así las cantidades de cumen que deben reciclarse. Sin embargo, esto requiere un control preciso del proceso. KROHNE ofrece multitud de sistemas de medida adecuados, como caudalímetros ultrasónicos con sensores de temperatura y presión, que se conectan directamente al equipo, permitiendo así una gran flexibilidad. Entre ellos se incluyen transmisores de presión para aplicaciones complejas de presión y nivel de proceso, como medida de presión absoluta y relativa en depósitos abiertos y – como variante doble – para medida electrónica de presión diferencial.